Segunda sidrería del finde, a la que nunca hemos ido dentro de la Sagardo Bira, y que está abierta al público desde hace sólo unos 10 años.
Asistentes: Josetxu, Iker, Josito, Edu, y Nesss, con baja justificada de Hilario, Susi, Bego, y María
De comer, chorizacos bien gordacos a la sidra, sin opción de barkitos, una tortilla de bacalao, hongos, y cebolla pochada, muy buena y jugosa (Ness comenta que está muy buena... y la tortilla también), sendos tacos de bacalao coronados por tiras de pimiento verde y una loncha de ajo que estaban muy buenos (aunque quizá demasiado individualizados, no se pueden hacer Josunes), y llegamos a pedir hasta tres chuletones (no muy grandes), de los que el primero fue el de mejor sabor pero en general demasiada esquina y hueso (incluso los harmónicos no pudieron apurar bien los huesos). De postre, queso, membrillo, nueces (demasiado apretadas), y martintxos (tartaletas de castaña, almendras, chocolate, y miel) que no son del gusto de Edu. Total, unos 146 euros (creemos, ya el necio de Nesss rechazó quedarse con la factura…), unos 30€ cada, lo habitual.
Tirada de fotos de todos y cada uno de los platos a pesar de las zarpas de Josetxu, que siempre estan en medio. A Edu le dura un suspiro la batería de la cámara. Empiezan a entrar manadas de chorbos (¿no tienen novia o qué?), que luego vimos que iban bastante borrachos. Algunos quisieron cenar sin reserva infructuosamente. Aparte de las manadas de jóvenes chimbos, compartimos la zona de comer de pie con un grupo de jubilaos y un grupo de cuatro chicas. Votamos democráticamente para ver quien le decía algo a la alta de ellas, y gana Ness por tres dedos (cuatro, si tenemos en cuenta las falanges cambiantes de Iker). Finalmente Nesss va, le dice algo, y vuelve cabizbajo pidiendo una nueva votación… que vuelve a ganar Nesss por cuatro dedos, jejeje. Mas tarde, en la zona de las kupelas metálicas Josetxu y Edu prueban a abrir una misteriosa puerta cerrada, lo cual hace que la chica alta les reprenda, pues coincide que trabaja alli, lo que provoca una reacción muy cortante por parte Edu que hace que pongan todas pies en polvorosa… y que después Edu vaya a pedir perdón por ser tan borde. Los bilbaínos borrachuzos se arrancan a cantar a lo que Edu responde a voces con bertsos de la Sagardo Bira siendo acompañado de Nesss pese al alzheimer de ambos para recordar la letra. Más tarde Edu, muy activo, hace la bilbaínada de hacerse un granizado de sidra al txotx en la calle, en manga corta y ante una gran audiencia que fotografiaba la parrilla.
Muchos txotxes y se empiezan a oir varios vasos rotos, costumbre a la que se suma Josito (somos los únicos que avisamos para que recogieran los cristales rotos). Edu ve que los jubilados salen de repente a la calle y les sigue para ver que entran en otra sala, por lo que avisa a los demás; allí el jefe da a probar a sus amigos de las dos kupelas metálicas de manzana francesa (con muy buena sidra, como le duele reconocer al kashero). Acude también la chica alta, va a ser verdad que trabajaba allí. Alli caen incontables txotxes y en el segundo viaje ya comienza el hermanamiento con el kashero quien pide hacerse una foto con Edu cogiéndole del hombro (¿esto no solía ser al revés? bendita sidra!!); Edu le comenta nuestro temores por ser una sidrería del Sagardo Bus pero el kashero niega la mayor. Reconocemos que al final, considerando el txotx clandestino al que nos apuntamos (porque para el gran público no hubo ninguno) nuestros temores estaban infundados y podemos darle un aprobado.
Al dia siguiente, Edu se levanta con un clavo del copón, Nesss no ha dormido ni hostias, y Josetxu come quesada que da asco verle. Gran granizada inmortalizada por Nesss. A las 14:00 consiguen sacar a Edu a la calle y tomamos un caldo y mosto en el Aitanetxe donde misteriosamente sigue sin haber tortilla de sangrecilla. Tras un requiebro sobre el granizo vuelven al Pacheco, que a pesar de tener la barra limpia de polvo y paja, tiene una buena oferta de pintxos (de los que gracias al cortante Edu, que interrumpio a la dueña, sólo conocemos oreja y chorizo);pedimos tres orejas (y ningún rabo) que resultan ser en salsa, bien hermosas, con buen trozo de cabeza, ligeramente picantes y muy buenas. Hernani vacío de gente, son las 15:00, tras ver que el Aralar esta vacío y sin pintxos vamos al Kitto donde caen dos pinchos de tortilla de patata (muy buena, aunque el pan era de madera) mientras asistimos al espectáculo danzarin de las tres sirenas (por lo que cantaban), que impiden por dos veces que Edu, que estaba medio desmayao de la resaca, pudiera salir del bar, seduciéndolo con danzas de apareamiento, miradas libinidosas, y tirones de su chamarra mientras los perros de los que creía sus amigos escapan como marikontxilis. Granizada y parada en el Triku, junto con los que pensábamos que eran amigos de las sirenas. Volvemos a echar siesta, luego se fue Josetxu y Edu y Nesss dan paseíto hasta el Hotel Txintxua picoteando y cenando en el Horbel a la vuelta. La gran granizada final casi nos mata subiendo la rampa de acceso a Nesss's porque se nos iban los pies cuesta abajo.